Finalmente, me dieron de baja el teléfono móvil de empresa.
Ahora soy un personaje de fábula, de esos que sólo aparecen en los cuentos... el grupo de "las personas sin móvil".
Vivir sin móvil es remontarse a principios de los 90, las olimpiadas de Barcelona con Cobi, la expo de Sevilla con Curro...a ése sí que se le echa de menos ahora.
Y como si de un flashback se tratara, me veo volviendo a quedar con la gente sin saber si aparecerá o no, trazando mis movimientos con antelación suficiente para que sepan donde estoy en cada momento y mirando si existen todavía las cabinas de teléfono por si una emergencia.
Pasas a ser "el incomunicado" y la gente te localiza por aproximación. Llaman a quien cree que puede estar cerca de ti..."pásamelo".
¿Y qué me dicen de las ventajas?
Al llegar a casa tienes muchas más cosas que contar y nunca sabes qué te puedes encontrar. ¡Os lo aseguro, vuelven a existir las sorpresas!
En el trabajo, no hay marrones de última hora, ni urgencias que no puedan esperar. Dejas de tener un busca, por lo que desapareces. Ir a tomar un café vuelve a ser "ir a tomar un café". Y se desvanece la improvisación como por arte de magia.
Conducir vuelve a ser una aventura. Desde que sales y metes la llave en el contacto hasta que la quitas te evades del mundo. Eres libre, independiente, despierta tu lado salvaje "Born to be wild."
Lo malo es que ya estoy mirando modelos y compañías.
:(
Momentos Truman IV - Boda alcalina
Hace 12 años
1 comentario:
Eso!! cómprate uno rápidito!! Que ayer me llamaba tu señora, a la que a su vez había llamado José, que te esperaba para jugar al pádel porque no sabía si aparecerías!!
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